Así lo afirmó el diputado Juan Manuel Rigau, en relación a las sendas críticas hacia la gestión de la Comisionada Gabriela Ciccarone, realizado por el aparato mediático del Gobierno provincial.
El legislador del departamento Pringles, mostró que está preocupado por la interna política que lleva a cabo el partido dominante. El dirigente radical señaló que: “hace una semana que la máquina mediática del Gobierno, viene criticando a la Intendencia de El Trapiche, cuando el problema de las cloacas viene de hace más de una década y donde queda reflejada la ausencia de control de los órganos reguladores del estado”.
Tanto la falta de inversión, y una deficiente planificación técnica condujo a una crisis ambiental en la localidad, cuyo río está contaminado con efluentes cloacales, y que alcanzan el dique La Florida, tal como lo señalaron ONG hace varios años. De este reservorio de agua, la ciudad de San Luis y los municipios vecinos reciben el líquido.
Más allá de las cloacas, que deben hacerse de nuevo, los problemas de El Trapiche son los mismos que las localidades del interior. “La calidad del agua, la sanidad, la educación, el transporte, la seguridad y la falta de mantenimiento de los caminos y accesos de parajes y pueblos, son y serán nuestros reclamos”, recalcó Rigau.
Todo indica que el Gobierno pretende con unas pinzas políticas modificar errores de gestión y concluir una interna del partido peronista. “¿Acaso nadie pudo darse cuenta años atrás de las condiciones del agua, cuando hubo pruebas y denuncias, porque justo ahora el tema sale a la luz?”, preguntó.
Entre todas las indicaciones del legislador, también hizo énfasis en la ausencia de control en los órganos del Estado provincial, en casos como el programa de Asuntos Municipales, que no tiene responsable y es el principal nexo (o al menos debería ser), entre el ejecutivo y las intendencias comisionadas.
Una Ley Integral del Agua
La temática del agua, no pasó desapercibida por Rigau y el Frente Progresista Cívico y Social, actualmente los representantes del sector en la Cámara baja, están trabajando en una normativa para cuidar el solvente universal desde sus nacientes hasta que llega al vecino.
El departamento Pringles posee casi el 70% o el 80% de las cuencas hídricas de la provincia, lo que lo convierte en el generador de agua más importante del territorio y una zona a preservar y vigilar.
“Nuestra iniciativa abarca desde los nacientes, hasta la distribución del líquido”, aclaró el diputado. Parte de los problemas a resolver es el acceso de todos los residentes de las zonas rurales al agua potable. En San Luis hay 16 diques y hay pueblos como Riocito, que está a 1000 metros del embalse La Florida, no tiene agua potable. En Nogolí, los pobladores que viven en las márgenes del lago artificial también señalaron que no tienen agua potable.
“Acá el oficialismo pregona que todos tenemos agua y no es cierto, sobre todo porque no hace falta una inversión multimillonaria para llevar el líquido a los más necesitados”, apuntó.
Rigau concluyó diciendo que nuestra provincia no aprovecha el agua de lluvia. “Todo el agua pluvial puede recuperarse y por el momento lo desperdiciamos”, estimó.
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